Abordamos la tercera parte de las incidencias originadas por las operadoras de telefonía móvil entre la comunidad de vecinos. Ahora vamos a abordar todas aquellas que tiene que ver con roturas y desperfectos en la finca. Por supuesto, provocados por los operarios de las contratas que trabajan para estas operadoras de móviles. Y es que, aunque los contratos de alquiler de antenas en azoteas contemplan esos riesgos y la manera de solucionarlos, lo ideal sería que nunca se produjesen. Vamos a ver algunos de los más hilarantes y curiosos:

• AL VERTEDERO: Donde una operadora llevaba a cabo las obras de construcción de su central de conmutación, se encontró con un tronco… ¡y era de madera noble africana! El arrendador lo tenía allí almacenado para fabricar cepillos. Y a la operadora le tocó pagarlo..
• HUNDIDOS EN LA MISERIA: Los vecinos empezaron a oír gritos de auxilio y la sirena del ascensor. Y es que los operarios cargaron todos los hierros y antenas de telefonía móvil nuevas en el ascensor… ¡y acabaron por hundirlo!
• ¡POR POCO NO LE ATRAVIESA LA CABEZA!: Una vecina del último piso ve, con verdadero pavor, como una hierro de armadura le cae del techo a pocos centímetros de donde hacía labor. Los operarios estaban construyendo los pilares de apoyo de una caseta y perforaron el forjado del techo del último piso. Al meter una varilla de armadura, esta se deslizó hasta el apartamento de la vecina de abajo.
• ¿DÓNDE ESTÁ EL ESPEJO?: Los vecinos se preguntaban, ¿pero en este ascensor no había un espejo? Y sí que lo había, pero los operarios de la contrata de una operadora de telefonía móvil lo rompieron al meter unos postes de acero en el ascensor. Y no dijeron nada, por si colaba.
• PUES YA PUESTOS, QUE PINTEN TODA LA ESCALERA: De subir hierros y aparatos por la escalera, los operarios hicieron mil y un desconchones en las paredes de los rellanos. Y aprovechando tal tesitura, el presidente de la comunidad exigió a la operadora de móviles que reparase y pintase toda la escalera, piso por piso.
• YA NO SE VENDEN PLAFONES COMO ESTE: Los operarios rompieron un plafón de luz de un rellano, y ya no había de ese modelo en el mercado. Total: que la operadora hubo de cambiar a un nuevo modelo todos los de la finca.
• SI ME CAMBIAS UNA CERRADURA, ME LAS CAMBIAS TODAS: Los operarios que no podían acceder a la azotea, van y rompen la cerradura de la puerta de acceso, pero esa cerradura era como la del zaguán de la finca. Por ello, la operadora de móviles cambió la cerradura rota, la el zaguán y proveyó de copias de esa nueva llave a todos los vecinos de la finca.

A pesar de lo increíble de algunos de los relatos anteriores, no hay que tener ni miedo ni prevención ante la posibilidad de firmar un contrato de alquiler para antenas de telefonía móvil en una azotea. Son más las cosas que compensan que los inconvenientes.

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